-Juan 3.9-. Jesús responde mostrándole el diamante de esperanza más grande de la Biblia. “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna” -Juan 3.16-. Estas veintiocho palabras arman un desfile de esperanza que empieza con Dios y termina en la vida,