"Noé construyó un altar para adorar a Dios."
Génesis 8.20 -TLA-.
Analizanado el significado del término, un altar representa un lugar de elevación; sobre él, las personas presentaban sus ofrendas a Dios.
El altar es símbolo de obediencia, fe, adoración. Noé, Abraham, Elías, Ezequías, prepararon altares. Abraham como obediencia a los que Dios le había indicado, lo que demostró también su fe; Noé, como forma de agradecer la respuesta de Dios. Elías, para hacer a Israel volverse a Dios, desafiando a quienes creían en la idolatría. Ezequías, como forma de presentar ante Dios el problema que vivía Israel de amenaza y burla de sus enemigos.
En todos los casos, preparar el altar singificó un encuentro con Dios.
Hoy en día, Dios también anhela que a diario nosotros también preparemos nuestro altar. ¿Qué significa esto? Él desea que vayamos al encuentro con Su presencia. Prepararnos implica dar de nuestro tiempo y darnos nosotros mismos.
Los motivos del encuentro pueden ser muy variados... Pero que el fin último y primero sea el demostrar nuestra obediencia, fe y adoración a Él; al Padre tierno y amante que tiene cuidado de nosotros.