o imaginamos, claro, siempre y cuando lo hagamos dentro de Su voluntad y no guiados por un deseo egoísta. Dios no nos dará algo que nos dañe. ¡Confía en Él!
Son interesantes las comparaciones que realiza la escritora Lysa TerKeurst, del Ministerio Proverbios 31:
- la provisión de Dios sostiene la vida. La tentación de Satanás la derrumba.
- la provisión de Dios genera bendiciones a largo plazo. La tentación de Satanás genera dolor a largo plazo, aunque a corto plazo sea muy prometedora.
- la provisión de Dios satisface el alma, algo que no puede resultar de la tentación.
"Por eso, de sus riquezas maravillosas mi Dios les dará, por medio de Jesucristo, todo lo que les haga falta." Filipenses 4.19.
¡Qué bueno es nuestro Dios! Suple TODAS nuestras necesidades. Entonces ¿por qué no recibimos TODO lo que pedimos? Y es que hay un "detalle" importante: lo que recibimos, es "...por medio de Jesucristo...", de ahí que solo recibiremos lo que esté de acuerdo a Su voluntad y si lo tenemos en nuestras vidas. ¡El Señor simpre nos está animando: con y en Él tenemos TODO lo que necesitamos!
ResponderEliminar¡Gracias Elena por compartir estos mensajes que infunden ánimo y nuevas fuerzas!