domingo, 9 de octubre de 2011

Desilusiones de la vida

"Mejor es la buena fama que el buen ungüento; y mejor el día de la muerte que el día del nacimiento.
Mejor es el fin del negocio que su principio; mejor es el sufrido de espíritu que el altivo de espíritu."  
Eclesiastés 7.1,8.


Es prudente analizarse a uno mismo y descubrir las limitaciones que tenemos porque esto ayudará a enfrentar las desilusiones con mayor resignación.  Las dificultades sirven para el perfeccionamiento del cristiano.  Dios imparte prudencia, sabiduría y victoria en medio de cualquier circunstancia.


En el capítulo 7 del libro de Eclesiastés, Salomón prueba que los efectos de la tristeza y el dolor pueden ser
beneficiosos para nuestras vidas.  Admite que hay ciertas formas de vida que son mejores que otras.  La expresión "tener buena fama" significa que tener una reputación intachable es mejor que tener todo el lujo del mundo o el mejor perfume.  Una vida honorable hace que el día de la muerte sea mejor que el día del nacimiento.Salomón aconseja ser sabios , reflexivos; insta a la prudencia, a ser cautelosos y no juzgar por las apariencias.


Los contrastes de la vida son permitidos por Dios.  
Tienen el propósito de que las personas desarrollen confianza y dependencia en Dios.


Tomado de "La senda juvenil", Editorial Evangélica de la Iglesia de Dios.

1 comentario:

  1. ¡Hola a tod@s!

    Sabido es que la vida está llena de "sin sabores", de rosas y espinas, de luces y sombras...

    Pero el Señor quiere ser sazón a nuestras vidas, dulce perfume en los momentos de dolor, luz potente que disipa la más densa oscuridad...

    Si le buscamos ante todo, tendremos lo mejor con Él, lo que realmente es importante, lo que realmente vale.

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